DISCURSO DE ASUNCIÓN
Saludar aquellos compañeros de todas las horas, con los que compartimos habitualmente nuestra jornada de trabajo, saben que tengo por costumbre cuando asumo un cargo dirigirme sobre todo a la A
samblea Nacional General de Delegados que para nosotros es prácticamente el órgano de superior jerarquía en nuestro sindicato y como tal así lo debemos tratar y respetar como se merece.
Como Vicepresidente en representación de todos los compañeros por el lema 28 de Mayo, la Lista del funcionario, solo quiero decir que nos presentamos a la contienda electoral con un compromiso bien concreto, que le fuimos transmitiendo a todos nuestros compañeros de todas partes del país; Independencia, que nada tiene que ver con el vacío ideológico, independencia de clase por sobre toda las cosas, Idoneidad,porque lo hemos dicho hasta el cansancio, las batallas que tenemos como clase trabajadora, las batallas cotidianas y las grandes que nos pone por delante la historia, no se ganan a los pechazos ni tampoco talenteando, necesitamos idoneidad, necesitamos inteligencia aplicada y emocional para resolver las controversias, pero sobre todo compromiso, sin el compromiso ninguna funciona.
Hoy le decimos a nuestros jóvenes; ponele actitud, ponele emoción, convertite en creíble, cree en lo que estás haciendo, de eso se trata el compromiso, de trasmitir todos nuestros ideales con una convicción cierta, de que en la aplicación transformamos la historia, por eso independencia, idoneidad y compromiso van a ser para nosotros los tres pilares fundamentales de esta conducción.
Como ustedes verán, nuestro sindicato es un sindicato nacional que abarca a más de cuatro mil trabajadores comprometidos diariamente con la Seguridad Social de nuestro país, con más de tres mil afiliados, pero tenemos que mirar a los más de mil que nos quedan y que no hemos podido arrimar a la actividad sindical y para los cuales me parece a mí, tenemos que trabajar de cara al futuro también.
Ese caluroso aplauso que vivimos hace instantes para los compañeros delegados del Sanatorio Canzani no es casualidad, es el aplauso de todos nosotros, de alguna manera los trabajadores organizados abrazamos a esos sectores de la sociedad que merecen y ameritan una reflexión y una lucha oportuna, por eso nuestros compañeros que se presentaron en esta nueva etapa para integrar el movimiento sindical saben del nivel de lucha y compromiso que hay que tener en esta nueva instancia, en donde se dibuja la segunda reforma de salud y en donde ponemos en juego muchas de las conquistas de la ex asignaciones familiares, por decirlo así, que nuestro movimiento sindical ha sabido dar y ha sabido conquistar como superador permanente de nuestra clase.
En los servicios de salud de asignaciones familiares nosotros conjugamos esa construcción histórica que nos saca de las rencillas particulares que tenemos como trabajadores, la lucha por el salario, la lucha por las condiciones dignas de trabajo, las luchas necesarias y justas pero que no nos puede dejar de mostrar el horizonte, la construcción social, que esos compañeros, como me gusta decir, visionarios, atentos a las necesidades del pueblo, supieron y pudieron construir en un momento donde en nuestro país, las esposas y los hijos de los trabajadores no tenían acceso a la salud como ahora la tenemos a través de sistema nacional integrado, pero lo que es más significativo para nuestro pueblo ,es la atención a la mal formación congénita y a todo tipo de discapacidad, nosotros decimos que en el siglo XX nuestro país tenía resuelto a través de las asignaciones familiares y la seguridad social el tema de la atención a la discapacidad y ni que hablar el tema de la primera infancia en nuestros centros maternos infantiles que se convirtieron en hitos en Latinoamérica por su nivel de atención.
En el siglo XXI nos toca el tremendo desafío de defender estos servicios de la voracidad de la mercantilización de la salud y de la organización que como pueblo aún no hemos podido lograr y es por eso nuestros compañeros más vulnerables aun buscan un nivel de atención que alimente y confirme el nivel de vida que nos merecemos todos en esta sociedad, por eso yo aplaudo a los compañeros del movimiento sindical que supieron construir mirando las necesidades del pueblo, un centro que fue y es actualmente un centro de referencia en América Latina y de referencia a nivel nacional.
Nos aplaudimos y a veces me pregunto porque, ser dirigente sindical como lo son los delegados de cada núcleo, de cada región, de cada departamento, es una tarea difícil y compleja si se quiere estar a la altura del compromiso que hemos asumido, por eso se impone la necesidad de pensarnos y de repensarnos como dirigentes y como delegados de núcleo, ¿Qué significa ser delegados hoy? , No cualquiera decide ni acepta serlo y no a cualquier el conjunto de trabajadores de nuestro país le imprime esta tamaña responsabilidad, quizás entonces, en vez de aplaudir debemos abrazarnos para conjugar ese esfuerzo que nos espera en esta larga tarea que en principio se plasma por dos años, pero que no se termina nunca, construir una sociedad de signo diferente, es una tarea que debemos llevar con hidalguía con valor y nobleza, con algo de locura y sueños, buscando quebrantar lo establecido, tenemos que animarnos a parecer locos, en esta humanidad de cuerdos que cada día nos destroza más, terminemos con tanta cordura y pasemos nuevamente al sueño.
Compañeros, la transformación de esta sociedad por la que todos bregamos como movimiento sindical, es una transformación que nos compromete desde el punto de vista de lo individual pero sobre toda las cosas, desde el punto de vista de lo colectivo, sin el colectivo no hay movimiento sindical, no somos sindicalista, debemos ser siempre y entendernos como movimiento sindical para construir y transformar la historia, su construcción depende de nosotros, vayamos por ella!!
Verónica Miranda
Vicepresidente ATSS