No solamente es un problema la pésima gestión administrativa y política del Banco de Previsión Social, también es indignante el manejo de los fondos de un presupuesto ajustado y re ajustado en varias ocasiones.
Los trabajadores y trabajadoras de BPS, sabemos y siempre supimos que el maltrato y la violencia, tanto institucional como de trato directo de jerarquías iluminadas, son al menos dos factores de riesgo para enfermedades profesionales y riesgos psicosociales, nada de respetar la salud, seguridad y prevención, pero tampoco hacer lo mínimo para evitarle a la gente – su gente – situaciones de riesgo innecesarias.
En los últimos días, se ha obligado a cumplir tareas que conllevan gastos del bolsillo del trabajador y que requieren del pago de un viático. En al menos tres situaciones hemos detectado que no hay fondos para este ítem en el presupuesto del BPS.
Quiere decir en palabras simples que los “indios” cumplimos por las necesidades de la gente con nuestra labor y corremos con los costos de traslados, lo legal es que el viático se debe pagar cuando se devengue, que no corresponde realizar y cumplir órdenes en el marco de falta de fondos para asegurar la gestión, que es responsabilidad de BPS.
No han sido capaces de planificar un buen desarrollo de capacitación, se han quedado muy cortos y violaron flagrantemente nuestro Estatuto, tampoco saben sumar para asegurar fondos, en el contexto de recortes feroces, lo “venden” a la prensa como un castigo ejemplar al “funcionario público”, sin advertir que nuestras tareas en una planificación adecuada, redunda en otorgarle derechos a una población que necesita del mayor Organismo del País en materia de cobertura de prestaciones sociales.
No cumplen la propia regla fiscal que se imponen, no saben gestionar el BPS, violan el Estatuto del Funcionario, maltratan a todo quien tenga una mínima queja fundada, no escuchan a los trabajadores, sindicalizados o no, arrasan, castigan, persiguen, tensionan y sobre todo generan estrés y abuso de nuestro máximo de capacidad, al mejor estilo explotación laboral de siglos pasados.
Mientras el funcionariado sigue esperando una impresora que al menos garantice que podamos escanear o imprimir o copiar, al menos una de tres, se cambia la flota de autos de los Directores por Toyotas CERO KM.
Mientras agotan los fondos en el nuevo subsidio de alquiler, propaganda política, porque en verdad están agotando los dineros para construir viviendas nuevas, dando soluciones de muy mala calidad, pero declarando a la prensa que es tarea de un Estado benefactor que cuida de sus adultos mayores, cuando en verdad los condena a soluciones transitorias y precarias; mientras vacían las arcas de BPS a favor de privados.
Además “les roban seis meses de diferencias salarial” a funcionarios ingresados en 2021, que debieron presupuestarse en mayo de 2024, pero a pesar de que en cuestiones económicas solucionan todo aquello que da rédito político, para las y los trabajadores no, a ellos y ellas que esperen, que se joroben y que pierdan su propio dinero, ante la miopía de resolver algo tan simple como generar una partida única, que se caracterizara por ser justa y reconocida.
El Directorio político que no solo no ha sabido, tampoco ha querido desarrollar una prolija gestión, no les importan los derechos adquiridos de sus funcionarios, no les importa la gestión real, no dicen cuántos expedientes (que son personas esperando, casi 800 enfermos) tienen a espera de resolución, ni tampoco asumen que sus mágicas formas de trabajar, han llevado a BPS a la peor gestión de la historia, su incompetencia, no tiene adversarios, nadie en BPS ha sido tan brutalmente incapaz ni mucho menos insensible, NADIE, en toda la vida de existencia de un Organismo que supo ser modelo de atención de resolución de casos y de sostén, de aquellos que por derecho; son el objetivo de la justicia social en este bendito País.
Pueblo Uruguayo, descarguen la APP BPS, pero no pretendan que funcione, Cabrera quiere salir en la tele a florearse con el trabajo ajeno, pero así como el simulador de AFAP para revocación de art 8 no es una garantía, tampoco lo será nada de lo que el salga a promocionar como “productos” o “hitos” de un Organismo que está para garantizar derechos, no para mostrar avances tecnológicos, que encima no funcionan.
Los pretendidos adelantos tecnológicos que se promueven tienen en su amplísima mayoría la necesidad de mano de obra de trabajadores para su procesamiento, y así mismo, para el asesoramiento de su uso, para responder las consultas, para resolver los problemas, y con la falta de personal por recorte de vacantes que tiene el BPS es completamente imposible que puedan funcionar adecuadamente, y mucho menos, dar soluciones reales a la población.
Oficinas en todo el país que se han convertido en meros lugares de recepción, a las que se les ha quitado toda capacidad operativa y de resolución por los nuevos modelos de trabajo y todo lo que ingresa se acumula a la espera de que muy pocos funcionarios/as puedan trabajarlo, el resultado, un enorme cuello de botella que hace que por primera vez en la historia, estos “adelantos tecnológicos” ocasionan mayores demoras, errores y problemas que las atenciones presenciales en las oficinas.
Sr. Presidente del BPS, ATSS está en conflicto con la realidad, –como Ud. Lo ha planteado- pero la única realidad es la verdad, y esta realidad y esta verdad es de recortes, de un BPS que no tiene capacidades objetivas para cumplir con su mandato constitucional, sin el personal suficiente ni las posibilidades de dar respuestas a la gente, a pesar de que su funcionariado viene desde hace casi 5 años trabajando al máximo de su capacidad y con un compromiso por el servicio del que ha dado sobradas muestras.
Señor Cabrera, Directorio Político del BPS, viene siendo hora de asumir responsabilidades, de asumir el desastre que han hecho, aquí hay un sindicato y trabajadores que seguirán luchando por volver a tener un BPS al servicio de la población.